ANTE UN DESAFÍO, ¿Lo que percibes es lo que sucede o integras la mirada de otros?
Cuando aparece un desafío y, dependiendo de tu manera de aprender o liderar, muchas personas se aíslan para encontrar la mejor respuesta a la situación, esta estrategia se agudiza con aquellos que tienen responsabilidades.
¿Te has puesto a pensar los recursos que no aprovechas de aquellos que trabajan contigo?
Dar respuestas con habilidad requiere la integración de miradas de las personas que son parte del equipo.
La habilidad del líder, además, requiere posicionarse, promover comportamientos donde todos puedan dar su opinión y así tomar lo mejor de cada uno para integrarlo en la mejor estrategia de cara a la obtención de resultados.
El líder se posiciona como parte del equipo, sus comportamientos impactan en los comportamientos de las personas y en los resultados. Un líder que tiene la capacidad de distinguir patrones de comportamiento y actuar de forma inmediata para alinearlos a las necesidades de la organización impacta no solo en los resultados sino también en la validación, clima emocional, involucramiento y compromiso de las personas.
¿Dónde te posicionas en el día a día?
UN RAZONAMIENTO INTEGRADOR ACARICIA EL CORAZÓN DE NUESTROS INTERLOCUTORES
Nuestra mayor capacidad para movernos en el mundo es analizar lo que sucede, para luego dar una respuesta “efectiva”, esta capacidad, es parte del legado de nuestra cultura, y como civilización, lo hemos aprendido durante siglos.
El análisis conlleva separar para entender, diferenciar, y en esa distinción accionar. Este tipo de reflexión es lenta, dado que son argumentaciones reactivas defensivas. Por lo tanto, el tiempo de adaptación al contexto es mayor.
La alternativa es una reflexión integradora, que ante un emergente observe relaciones, en la mayoría de los casos antagónicas, para, en su fusión, permitir respuestas innovadoras y ajustadas a la necesidad emergente.
En esta situación disruptiva, la capacidad de establecer vínculos exitosos entre diferencias se hace explícitamente más importante que obtener el control unilateral de una situación.
La importancia radica en que el flujo de información se incrementa integrando todas las miradas, facilitando la adaptación a lo nuevo. Además, genera un tipo de comportamiento del sistema altamente efectivo para nuevos desafíos validando a las personas, potenciado el compromiso y el involucramiento.
¿Qué precio pagas por tu forma de liderar y conversar?